BENEDICTO XVI
“Doy gracias a Dios por sus dones, y también a tantas personas que, con generosidad y amor a la Iglesia, me han ayudado en estos años con espíritu de fe y humildad”.
El Papa estuvo especialmente cercano a los peregrinos y los aplausos y gritos de 'viva el Papa' interrumpieron 17 veces su discurso. Benedicto XVI explicó como ha vivido estos años al frente de la Iglesia y la seguridad que ha encontrado al sentirse guiado por Dios.
BENEDICTO XVI “Desde que asumí el ministerio petrino en el nombre del Señor he servido a su Iglesia con la certeza de que es Él quien me ha guiado. Sé también que la barca de la Iglesia es suya, y que Él la conduce por medio de hombres. Mi corazón está colmado de gratitud porque nunca ha faltado a la Iglesia su luz”.
El Papa dijo que tras su renuncia no abandona la cruz porque la renuncia total a la privacidad que le pidió Dios cuando fue elegido Papa fue “para siempre”. Ahora deja el gobierno pero sigue activo “de otro modo”, recogido en oración y sin actividad pública. El Papa pidió a los peregrinos que recen por su sucesor.
BENEDICTO XVI “Os suplico que os acordéis de mí en vuestra oración y que sigáis pidiendo por los señores cardenales, llamados a la delicada tarea de elegir a un nuevo Sucesor en la Cátedra del apóstol Pedro”.
En esta ocasión el buen tiempo acompañó y la despedida a Benedicto XVI tuvo un tono festivo y agradecido que inundó las calles de Roma con miles de peregrinos que no quisieron faltar a la histórica cita.