martes, 26 de junio de 2012

El papa Benedicto XVI aceptó la renuncia de Mons. Bargalló...


Buenos Aires, 26 Jun. 12 (AICA)
Escudo papal
El Santo Padre Benedicto XVI aceptó la dimisión de monseñor Fernando María Bargalló, de 57 años, al gobierno pastoral de la diócesis de Merlo-Moreno, en conformidad con el canon 401, párrafo 2, del Código de Derecho Canónico, y nombró Administrador Apostólico -ad nutum Sanctae Sedis- de esa diócesis a monseñor Alcides Jorge Casaretto, de 75 años, obispo emérito de San Isidro.

     La información fue comunicada esta mañana por el nuncio apostólico monseñor Emil Paul Tscherrig, a través de la agencia AICA.

     El párrafo 2 del canon 401 dice: “Se ruega encarecidamente al Obispo diocesano que presente la renuncia de su oficio si por enfermedad u otra causa grave quedare disminuida su capacidad para desempeñarlo”.

     La diócesis de Merlo-Moreno fue erigida por Juan Pablo II el 13 de mayo de 1997, y comprende los partidos bonaerenses de Merlo y Moreno, que fueron desmembrados de la diócesis de Morón. La sede episcopal fue fijada en la ciudad de Moreno. La diócesis tiene una superficie de 350 kilómetros cuadrados con una población de unos 900.000 habitantes, de los cuales se estima que el 80% son católicos.

     Monseñor Bargalló fue su primer obispo, nombrado por Juan Pablo II el 13 de mayo de 1997. Tomó posesión de la sede e inició su ministerio pastoral el 28 de junio de 1997. Antes había sido obispo auxiliar de Morón desde su ordenación episcopal el 31 de mayo de 1994.

     Monseñor Alcides Jorge Casaretto, designado Administrador Apostólico de Merlo-Moreno, fue durante 27 años obispo diocesano de San Isidro, diócesis a cuyo gobierno pastoral renunció por haber cumplido 75 años, edad que señala la norma canónica. El Papa le aceptó la renuncia el 30 de diciembre de 2011. No obstante conserva el “título” de San Isidro en calidad de emérito.

     La expresión “ad nutum Sanctae Sedis” incluida en el nombramiento de monseñor Casaretto, indica que permanecerá en el cargo de Administrador Apostólico hasta que la Santa Sede designe al nuevo obispo diocesano.